Es un sistema de descontaminación de aguas procedentes de los lavados de envases y equipos de tratamientos fitosanitarios mediante fotocatálisis solar, que se centra en la posibilidad de reutilizar el agua de lavado una vez se ha tratado para eliminar los residuos de plaguicidas. Pretende demostrar que es posible una técnica alternativa económica y ecológica, para degradar los residuos de plaguicidas producidos en las fincas por remanentes en envases y depósitos de los equipos de tratamiento, así como del enjuague de estos tras su uso, limpieza de maquinaria y equipos, etc., con un equipo innovador ubicado en las explotaciones. El agua descontaminada puede ser usada de nuevo sin producir ningún residuo adicional.
Tras ser implantado en las fincas, y monitorizados los resultados, se ha obtenido que más del 85% de la cantidad total de plaguicidas encontrados en las aguas de lavado puede ser degradada en unos pocos días, porcentaje que puede ser incrementado si se amplía el tiempo de exposición de esas aguas a la luz solar. Se demuestra así la eficacia en la degradación de los plaguicidas y su viabilidad técnica, medioambiental y económica. Se trata de un sistema ubicado en las explotaciones agrícolas, fácil de usar y que permite un tratamiento ecológico del agua residual. Proyecto fue cofinanciado por la Comisión Europea mediante el programa Life.